Si vas manejando por la autopista, en una hermosa
noche cualquiera, todo te podrías imaginar (hasta que caigan sapos del cielo como en la peli de
Magnolia jeje) menos encontrarte con otro auto en sentido contrario que conduce justo hacia ti en
tu carril de la carretera. ¡Imagínate la impresión! puedes suponer que el tipo/a se ha vuelto loco, es un demente suicida, es miope (mio-pendejo?), o de plano se cree que está en Inglaterra y anda al revés el wey.
Esto me pasó a mí, pero... ejem... cof cof... hoy es un bello dia no? ... em... Bueno!! si, ya!!!!!! lo diré!! esto me pasó a mí pero
yo era la loca desquiciada que iba en sentido contrario en la autopista, gulp! (a lo mejor yo iba bien y él es el que iba en sentido contrario, con eso de que cada parte tiene su punto de vista relativo; estoy salvada! no creo verdad jeje) y desde aquí quisiera pedir perdon al pobre cristiano, espero que no haya sido cardiaco o diabetico.
Calma todo tiene una explicacion!
Resulta que iba yo
manejando hacia mi casa, luego de salir del trabajo tome la autopista y casi llegando a la caseta de peaje quise
acortar camino (es un poco dificil de explicar pero para tomar el camino que esquiva la caseta, no puede uno simplemente tomarlo y ya, porque está del lado izquierdo y hay una barra de contención, tiene uno que irse hasta la caseta y de ahí devolverse... todo un martirio que tenemos que hacer diario todos los que viajamos de Saucillo a Delicias) .
Bueno pues como tenía prisa no quise irme hasta alla y acorté camino, había visto que muchos se pasaban al otro lado de la carretera antes de las barras de contención lléndose en sentido contrario por un camino paralelo a la carretera y de ahí subían de nuevo y solo agarraban un tramo corto de autopista donde se iban (en sentido contrario) para poder bajar por el camino mencionado. Pues
me arriesgué a pasarme al otro lado, pero como estaba oscuro no encontré la bajadita para quitarme del lado contrario de la autopista así que me dije ni modo no puedo bajar, está muy alto, voy a irme a madreselva (a madre, rápido) en sentidocontrario y
si viene un carro, como es de noche veré las luces a distancia. Lo malo es que es curva y de repente
veo unas luces que no parecian de tan lejos y lo único que me quedó por hacer fue acelerar para bajarme de la carretera lo mas pronto posible antes que pudiéramos chocar, se me hizo eterno el trayecto, cuando vi que era inevitable encontrarnos de frente lo unico que me restó fue
hacerle el cambio de luces como un millon de veces por segundo jeje, para que viera que era una situacion extrema y se cargara para un lado, obvio que el tenía que "saber" que yo asumía que iba mal pero en ese momento lo mas importante era apelar a su habilidad y aliarnos para agarrar cada quien un lado, porque por
la presion y los nervios pudimos no habernos puesto de acuerdo y
haber chocado (y este blog se quedaría sin dueña jiji), pero gracias a dios y a la pericia la libramos, porque él venía recio y yo tambien, por eso las cosas estaban al borde.
Afortunadamente
salvamos la vida, sentí la adrenalina a flor de piel, en qué momento puede uno tomar malas decisiones y ver todo tan facil para luego llegar a un punto en que sólo esperas un microsegundo o un milimetro de salvacion. No niego que la regué bastante por no tomar en cuenta que de noche era mas dificil esa maniobra y no medir los riesgos, tambien confiezo que esta
situación al límite me gustó, aunque se oiga irresponsable pero la adrenalina tambien es un alimento del cuerpo, claro que no puedes ir por la vida propiciando estas situaciones -sobre todo cuando afectas a terceros-, pero así sucedió, y ahora lo puedo contar con gracia y no sin un poco de susto al remontarme a ese momento en que el corazon se me aceleró a mil por hora. Me hizo pensar muchas cosas. Incluso cuando llegué a mi casa
no le conté a nadie lo que pasó ese día, ni lo mande dios!. Muchos días despues -de hecho apenas ayer- se lo conté a una de mis hermanas.
Pero qué cerca la vi!